Fubyodo 4: La propuesta del almuerzo, y un beso
-Bien,
ya termine la tarea de matemática, y estos días estuve estudiando muy
intensamente, creo que debo relajarme un poco, porque puede ser malo para la
salud.
Me
digo a mi misma en mi habitación. Veo hacia la ventana, está la gatita de
siempre. Le tendría que poner un nombre… No sé, pero me hace acordar a un
personaje típico de las novelas… Tal vez, el personaje de una pequeña niña
valiente que se crío en un bosque, y que solo tiene como arma un arco…
-Te
pondré Yumiko, ¿Qué te parece?- Digo dirigiéndome hasta la ventana con la
silla.
Me
puso su cabeza en mi mano. Es una gatita muy mimosa, color dorado y los ojos
verdes, Su pelaje me hace acordar a Sakaragua, y también su personalidad.
-Yumiko
¿Quieres dormir en mi habitación hoy? Esta mas calentita y afuera tendrás frio.
Como
si me hubiese entendido, salto adentro de mi habitación, como si fuera mi
mascota. Es tan adorable.
Mejor
me voy a dormir, mañana me iba a tocar un día bastante largo, con todo lo que
pasó hoy.
Después
de haber entrado a la escuela y dirigirme al aula, veo que entran varios
alumnos con miradas hacia mí, y algunas chicas se me acercaron:
-Yoshimi
San, ¿Qué pasó con Yutaka, Megurini y vos? Te vimos hablar con Haruka y
empezaste a gritar, después te agarro Yutaka del brazo, ¿Qué pasó? – Me
pregunta una de las chicas del grupo, parecía que en el centro había una chica
muy linda, que era en centro del grupo.
-Nada,
no pasó nada.
-Pero,
¿Por qué gritaste haci? – Pregunta otra de las chicas.
-Eso
es más asunto de Haruka y yo- Le respondí con amargura mezclado con mi tono de
voz normal.
-Pero…
-Chicas,
si Yoshimi no quiere compartir eso, mejor no molestemos.- Dijo la chica que
estaba en el centro. Tenía cabello Lila, y las uñas del mismo color. Era muy
bonita.
-Pero,
Ichigo San…
-Basta
chicas, déjenla en paz.
A
sí que ella es la famosa Tamashi Ichigo. Escuché que es famosa en la escuela,
por llegar a puesto N° 1 en el ranking que hacen los chicos de primer años. Es
muy popular, linda, amable y bastante inteligente. Es un modelo a seguir.
Como
tal dijo ella, las chicas me dejaron de molestar. Después vinieron otros chicos
y chicas a preguntarme lo mismo, y les di la misma respuesta a todos. Cuando
entro Haruka y se sentó delante de mí, sentí como se me ponía la piel de
gallina, aunque ni si quiera la miré. Odiaba pelearme con Haruka, rara vez nos
pasaba esto, y las pocas veces, era de menor importancia y solo duraba un día,
cuando no aguantaba más, la llamaba llorando y pidiendo disculpas por esa pavada
que pasó. Pero me parece que esto iba a durar más.
Cuando
Yutaka entró, me miró. Fue extraño, porque no me hizo ningún gesto, ni nada.
Solo me miró.
Cuando
estábamos en clases, él me tiro un papel (los dos nos sentamos atrás, solo que
yo del lado de la ventana y él del lado de la puerta) y casi me asuste, porque
estaba muy concentrada en otra cosa. Cuando lo abro, decía:
“Después, en el almuerzo, ve hacia la terraza de la escuela”
El
papel estaba todo arrugado y echo un bollo. ¿Qué quiere?....Espera…. ¿No querrá
decirme algo importante? Como en esa canción, de Hatsune Miku y Rin Kagamine,
creo que se llamaba “Doki Doki Yuri Gakuen”
En la que Rin se le confiesa a Miku en la terraza de la escuela… ¿Qué
estás pensando Kaori? ¿En serio pensé que Yutaka se me confesaría de esa
manera? Mejor espero para ver que quiere en el almuerzo. ¡Kya! Todavía el
profesor sigue escribiendo, mejor me concentro.
En
la hora del almuerzo, Haruka se fue con unas amigas a almorzar. Como odiaba
pelearme con Haruka. Para el almuerzo, siempre me iba a comer con ella, o
íbamos las dos para algún grupo de chicas a charlar. Casi me olvido, tengo que
ir a la terraza. Por las dudas, voy con el almuerzo en mano. Cuando me estoy
yendo del aula, sentí que Haruka me siguió con la mirada, no le di importancia.
Ya
arriba, no había nadie a quien poder
ver. Estaba sola
-¿No
me habrá mentido?
-Parece
que venciste al miedo, y viniste, Pequeño Osito
Estaba
él arriba de una columna. Como me asusté, y a la vez me sonroje ¿Por qué me
dice Osito? Mejor dicho ¿Por qué siempre me pone apodos de animales?
-E...esto…
¿Por qué me llamaste aquí?
-
Te peleaste con Haruka ¿no? Ibas a almorzar sola, e iba ser peor para vos.
–Dice Bajando de ahí.
¿En
serio que Yutaka Toshiki, uno de los alumnos más temidos en la escuela me
invitaba a comer junto a él?
-¿Estas
s-seguro?-Digo, sentándome apoyada en la pared
-No.
Pero creo que este tema es mi culpa, y tengo que recompensarlo de alguna
manera. ¿Qué te parece un trato? Hasta que se disculpen Haruka y vos, y
sabiendo que son mujeres y va a tardar bastante esto, te dejo almorzar conmigo
para que no estés sola ¿Qué te parece? –Dice él sentándose a mi lado.
Me
quede muda. Muda y Sonrojada ¿No será una ilusión esto? Tal vez escuche mal.
-¿Po-podrías
repetir….?
-Es
tal como escuchaste. No escuchaste mal.
¿Cómo
puede leerme el pensamiento este chico?
-Bu-bueno,
si no es molestia…
-Es
una molestia total esto, pero reconozco que tengo que ayudar de alguna manera.
A
veces es tan sincero que asusta.
-E-está
bien. Muchas gracias.
-De
nada.
Fue
algo rara esta conversación en cierto modo. Pero creo que tenía razón. Si comía
sola en el aula, iba a quedar como si no tuviera a nadie más que Haruka…
Aunque…creo que es verdad, además de Haruka no tengo a nadie más. Las chicas
del curso no sé si me aceptarían. Esto queda demasiado mal, pero no tengo
opción, además, Yutaka está siendo amable con migo….de alguna manera.
-Bien,
y… ¿Qué tienes de almor….? ¡¡Hey, ese es mi almuerzo!!
Había
quedado la mitad de mi almuerzo en el plato, y la otra mitad se la comió él.
-¿Eh?
¿No escuchaste? Nunca traigo almuerzo de mi casa, y tampoco traigo dinero, a si
qué en cierta manera es un beneficio para mí, ya que siempre muero de hambre a
esta hora del día. Si no escuchas más atentamente a la gente, y si tampoco
estas en las nubes, la gente no se va a aprovechas más de vos. Creo que te
tengo que ayudar en escuchar más a la gente.- Me dice el, dándome un golpecito
en la frente
-¡Auch!
¿Por qué me quieres ayudar?
-Porque
no aguanto que la gente no me escuche cuando le hablo, y si voy a almorzar
contigo todo el año, va a ser una molestia.
-¿Vos
crees que me enoje con Haruka todo el año restante?
-Lo
más probable. Prepárate para esto, porque va a ser muy fuerte tal vez para vos.
Que
difícil va a ser la hora del almuerzo ahora en adelante. También va a ser
difícil saber algo sobre él. Es tan difícil saber algo de Yutaka.
-Bien,
no te comas otro bocado más, porque…
Se
comió ya todo mi almuerzo.
-Esto
es una lección, para que no estés tanto en las nubes
Al
final, esto va a ser un castigo, más que
una ayuda.
Cuando
terminamos, mejor dicho él terminó mi almuerzo, pensaba hablarle un poco y eso
fue lo que hice:
-Y
dime…Volviendo al tema de dónde vives…
-Lejos
-¡Ya
te dije que especifiques más!
-Dijiste
“que falta de ubicación”
-Bueno….es
lo mismo
-Como
quieras.
Nos
quedamos un rato en un silencio incómodo.
-Para
venir de mi casa hasta el colegio, tengo que tomar dos trenes de una hora y media.
¿Por
qué de la nada dice las cosas?
-Eso
quiere decir que vives a 3:00 hs del colegio.
-3:30,
tengo que caminar media hora desde la última estación de trenes hasta la
escuela.
-Pero
¿no hay una escuela más cerca de tu casa?
-Vivo
en una pequeña ciudad, dónde no hay escuelas. Muy lejos de aquí.
Me
sorprendió bastante ¿tan lejos vivía? Y pensar que hay alumnos que se quejan de
que tienen que viajar mucho.
-Pero
¿tu familia no puede mudarse a un lugar más cerca de una es…?
-Mi
familia no tiene el dinero que necesita. Tengo cuatro hermanas menores, a las
cuales tengo que cuidar, ya que ese viejo bastardo nos dejó en esa pequeña
ciudad casi sin dinero. Desde ese entonces, mi madre trata de buscar trabajo
para nosotros, pero todavía no encuentra nada, y no sé para qué tengo que venir
a esta maldita escuela si yo sé que no podré encontrar buen trabajo en un
futuro. Sería mejor si no viniese a esta escuela, y mi madre no tendría que
cuidar a mis hermanas, y pudiera buscar
un trabajo digno. ¡Maldición!
Me
quede muda. Nunca pensé que le pudiese
pasar ese tipo de cosas….o tal vez pensé que eso mismo le pasaría. No lo
sé, fue todo tan repentinamente, y también lo dijo de un tirón.
-Tsk,
pensaba dejarlo en secreto para todos, excepto a los profesores. Perdón, pero
no lo quise decir. Si quieres ya puedes salir corriendo a contárselo, así al menos
te tendrán más respeto ¿no?
Fue
raro, y me dio pena de alguna manera. Se nota que todo el mundo hablan mal de
él a sus espaldas sin si quiera saber en qué situación familiar y económica
está.
Se
notaba que en su rostro había tristeza tratando de que no se note.
-Bien,
no le diré a nadie sobre esto. Si se lo digo a alguien, te pondrás triste.
-No
tengas piedad hacia mí, odio eso.
-No
es piedad.
-Entonces
no tengas lastima hacia mí.
-Tampoco
lastima. Solo que no me gusta ser una chica que cuenta los secretos de otras
personas, cuando esa persona no quiere que los demás sepan.- Digo con una
sonrisa.
Parece
que dentro de sus ojos estaba suspirando del alivio.
-Gracias.
Y
con esto, se fue de la terraza hacia abajo.
-Yu-¡Yutaka!
-¿Si?
-E-esto…si
necesitas ayuda, no tengo problema en que me consultes algo, como…
-Deja,
estoy bien.
-Ah,
es-está bien.
-Adiós.
Y
con ese gesto con la mano, se despidió. Quede tan roja, que cuando bajo por las
escaleras, había gente que me preguntaba si quería ir a la enfermería ¡Qué
vergüenza!
De
repente, cuando estaba en el recreo que siempre tenemos, aparece la famosa
Tamashi Ichigo, pero apareció sin sus amigas que siempre la rodean.
-Hola
Kaori, ¿podría hablar un poco contigo?
-Ah,
Tamashi. Claro, no hay problema.
-Por
favor, si no es molestia, llámame Ichigo-Chan
-E-está
bien, Ichigo-chan. Y… ¿de qué me querías hablar?
-Seguime,
aquí no podemos hablar.
-Ah,
claro.
Fue
raro ¿Ichigo Chan? Apenas la conozco ¿y ya quiere que le diga tan
afectuosamente?
Me
llevó a un lugar de la escuela. A una parte trasera de la escuela, con un
banco.
-Siéntate,
por favor.
-Si.
-Veras,
hay algo que me inquieta desde hace poco. Ya sé que recién hoy te conocí, pero
siento que debo decirte esto.
¿¡Otra
vez “Doki Doki Yuri Gakuen”?!
-Y
bueno, te tengo que decir esto- Me dice, agarrándome las manos- aunque creo que
esto está mal, tengo que decírtelo. Mis padres me prohíben esto rotundamente,
nunca me dejarían decir esto. Bien, lo que te quiero decir…
-¡¡ESPERA!!
¡Ichigo-San, creo que esto está muy mal, no debes hacer este tipo de cosas!
-Lo
sé. Pero lo tengo que decir…
-¡NO!
Esto está mal-Digo, parándome de un salto- yo todavía no encontré el amor
perfecto, pero eso no quiere decir que…bueno…me tengan que gustar las chicas.
-…
¿De qué rayos hablas, Yoshimi?
-¿Are?
¿No te me ibas a confesar?
-¡Kaori!
¿Qué estás pensando? Pensé que eras una persona más pura. Te iba a decir algo
sobre Haruka.
Me
puse tan roja ¿Por qué tendría que pensar eso de Ichigo? Si es una chica linda,
inteligente, y con un buen futuro ¿por qué tendría que gustar de mí, una chica
tan torpe? Estoy nerviosa, no sé por qué, pero lo estoy. Tal vez es por Yutaka.
-Eh,
Kaori
-Ah,
sí. Perdóname. Olvida lo que dije antes, estaba medio nerviosa.
-¿Por
qué?
-Pasaron
varias cosas hoy- Dije, echando un suspiro- Bien, y… ¿Qué pasó con Haruka?
-Cuando
Te habías ido corriendo, Haruka salió molesta del escondite en que estabas vos
y ella…
-Espera
¿Por qué antes decías que esto no me lo podías decir?
-Bueno…Mis
padres de pequeña, siempre me dijeron que no tenía por qué contar estas clases
de cosas, ya que a eso se le decía cotilleo, y no me gustaba nada, pero ahora
veras por qué te lo estoy contando. Bien, me quede en que…ah, sí. Bien, cuando
saliste corriendo de ahí, Megurini le grita a Yutaka, cosas como “por tu culpa
pasó esto” o “si algo le pasa a Kaori, es por tu culpa” y bueno, lo que forma
parte de lo verbal, ya no es muy agradable que digamos. Luego, parece que
Yutaka se molestó, y la agarró del cuello del uniforme, como me dijeron que
pasó esa vez. Luego, parece que le golpeo un poco fuerte tanto, hasta que
Megurini como que lo empuja, y parecía que le iba a pegar más fuerte todavía, pero algunos chicos lo detuvieron. Y si te
fijas, en esta parte de su ojo –Me dijo, señalándome una parte cerca del ojo-
Tiene un poco morado. Si le pegaba más, iba a quedar bastante feo. Luego,
algunos profesores lo detuvieron, y se quedó con un profesor charlando. Luego, a Haruka le
preguntaron si quería ir a la enfermería, pero dijo que no era nada, aunque
para mí le tuvieron que poner algo. Tal vez, no quería que vos sepas nada, pero
te lo digo, porque estos días Yutaka no le hiso caso a nadie, dicen que ya le
pego a todos del equipo de futbol, pero a ti Kaori, a ti te hiso caso aquella
ves que casi le pega a Megurini. Él te hace un poco más caso que a los
profesores. ¿Entiendes un poco más?
Me
quede muda. ¿Él me hace caso? Y…pensé que aquella vez no le había pegado, por
compasión y por qué fue su primer día en la escuela.
-Y…Ichigo…
¿en qué sentido me hace caso?
-Haber…
¿Qué sentido se te ocurre?
A
decir verdad, ninguno…. ¡Ya sé!
-En
el sentido en que un perro hace caso a su amo.
-.……¡¡JAJAJAJAJAJAJA!!
Se
echó a reír tan fuertemente que lo escucho casi toda la escuela.
-Ichigo,
t-tranquila.
-¡JAJAJAJA!
Me
puse más roja de lo que estaba. También
¿Cómo se me podía ocurrir esta estupidez?
-P-perdón
Kaori, es que fue demasiado gracioso- Dijo, secándose las lágrimas de la risa.
-No,
no pasa nada- Dije, más roja que antes.
-Bien,
ahora... ¿entiendes por qué tienes que arreglarte con Megurini?
¿Arreglarme
con Haruka? ¿Qué tenía que ver todo esto con Haruka?
-Ah,
perdón, no te explique todavía. Bien, parece que Yutaka solo golpea a los
chicos, pero, hasta ahora, de las chicas, solo golpeo a Megurini. O sea, que si
te reconcilias con ella, tal vez reciba menos golpes.
-…Yo
creo que ella es lo suficientemente fuerte para defenderse, no necesita a
alguien como yo. –Y con esto, me fui delante de Ichigo, bastante ofendida.
Cuando volteo la cabeza un poco, veo a Ichigo,
con un rostro de decepción, yéndose. Creo que fui bastante mala con ella…no,
siempre fui muy buena con los demás, y tengo que pensar un poco en mí. Bien, ya
está por terminar el recreo, mejor vuelvo al aula.
Cuando
terminaron las clases, fue todo normal. Haruka se fue sola, claro que yo
también pensaba hacerlo, hasta que escucho mi nombre desde lejos.
-¡Yoshimi!
Era
Sakaragua.
-¿Cómo
está, Sakaragua-Kun?
-Bien
¿y vos?
-Medio
cansada, tuve varios encuentros raros.
-¿Encuentros?
-Nada,
olvídalo.
Estuve
con Sakaragua al regreso de casa. Hablamos de tantas cosas, como del consejo
estudiantil, o del festival escolar, es más, cuando pasamos por la heladería
que estaba cerca de la escuela, él me compró un helado. La pasamos tan bien.
Después de tanta cosa, me había olvidado de que hoy él salió más temprano de la
escuela
-Sí,
hoy salí más temprano, por que como te habías peleado con Megurini, y no iva a
salir con ella de la escuela, quise acompañarte.
Me
puse toda roja ¿en serio quería acompañarme a mi casa? Es tan dulce Sakaragua.
-¿E-enserio?
-Sí,
y no quería molestarlas antes, porque iva a ser una falta de respeto si no.
Seguimos
hablando, hasta que llegamos a la calle que él tenía que ir para el otro lado.
Como me hubiese gustado que siguiera la calle, y nunca terminara.
-Bien,
me tengo que ir ahora, nos vemos mañana.
-Bien,
adiós Sakaragua- y cuando dije eso, me le acerco a la cara, y de puntas de pie,
le doy un beso en la mejilla, creyendo de que estaba de vuelta en Argentina,
que haci es como nos despedimos haya. Cuando lo beso en la mejilla, me di
cuenta de que tiene la piel suave, como la de un bebe. Fue tan lindo, hasta que
volví al mundo real, y veo a Sakaragua sorprendido…sorprendido y rojo, hasta
que al verlo me quería morir, y quise salir corriendo.
-¡¡A-adiós
Sakaragua!!
-E-espera
Yoshimi- me dijo agarrándome del brazo, y dándome también un beso en la
mejilla.- Nos vemos pronto.- Dijo, yéndose hacia su lado.
Me
quede muda y roja.
-Sakaragua
Takeshi…me dio un beso en la mejilla.- Y al decir esto, me fui corriendo de la
felicidad hacia mi casa, y casi chillando. ¡Que felicidad!
-Hoy,
fue un día raro, molesto, pero al final, fue hermoso. Aunque es raro, si
Sakaragua es mi amigo, ¿Por qué estaba tan feliz cuando me dio el beso en la
mejilla? Qué raro ¿no, Yumiko?
-Nya~
Estaba
en mi habitación, con una gatita en brazos, escuchando Electric Angel.
-Sakaragua…
Me
puse mi almohada en mi cara, gritando de la felicidad.
-¡¡Kaori,
Kaori!! Cállate que quiero dormir- Decía mi hermano, que estaba al lado.
No
escuchaba nada, la felicidad me comía. Como me gustaba este nuevo sentimiento
que movía tanto mi pecho, aunque, como leí en varios libros de romance, este
sentimiento podía convertirse en algo que odiara, pero por ahora me encantaba.
Y bien, que les a parecido mis amores? emocionante, o una novela barata que se compra...mejor dicho que la encontras en la calle tirada? xD
Bien, en este capitulo veras que Yutaka esta en cierta situacion tanto familiar como economica. y veran, en argentina se saluda siempre haci, pero en japon es medio raro saludar haci, se toma más para familiaries o parejas o para tambien perconas que tiran onda a otra persona (como yo digo, pero quiero decir "coquetear"), y Kaori recien se da cuenta de que a Sakaragua lo conoce hace no tanto tiempo xD y bueno, no sé lo que hare en la parte 5 pero...estara...etto...luego lo pienso. Bien aquí se despide Kaori san bye!
me encanto el cap!! *0* me emocioné en lo del beso, creía que sería en la boca pero eso sería ir muy deprisa en la historia, así que mejor ^w^ y por un momento pensé que habría yuri xDD y ya leí los capítulos anteriores, ahora si me enteré de la historia xD
ResponderBorrarsaluditos! ^^
Me alegro de que te haya gustado ^^ y si, creo que tambien sería demasiado apresurado con lo del beso xD gracias por comentar!
BorrarBy:Kaori San